Pablo Díaz - sobreviviente de La Noche de los Lápices -
A partir del 2006, el ex presidente Néstor Kichnner firmó un proyecto de ley que propone denominar la fecha 16 de septiembre como el Día Nacional de la Juventud, en conmemoración a los estudiantes desaparecidos de La Plata (1976) en el marco de la última dictadura militar. Este mismo día 10 estudiantes secundarios de la Escuela Normal Nro 3 de La Plata, que exigían, y militaban, por el BES (boleto estudiantil secundario) - María Claudia Falcone, Horacio Ungaro, Claudio de Acha, Francisco López Muntaner, María Clara Ciocchini, Daniel Alberto Racero - fueron secuestrados, torturados y desaparecidos. Cuatro de ellos - Pablo Díaz, Emilce Moler, Gustavo Calotte y Patricia Miranda- lograron sobrevivir, saliendo en libertad entre los años 78 y 80'.
La política era tema constante de charla y acción. Los chicos que militaban pertenencian en su mayoría a la Unión de Estudiantes Secundarios (UES), la Federación Juvenil Comunista (FJC) y la Juventud Secundaria Peronista (JSP). En ese entonces la militancia, la conciencia y participación de los estudiantes ponía en peligro los intereses capitalistas, por ende de los sectores reaccionarios oligárquicos y del Proceso de Reorganización Nacional.
La fecha no sólo debe servir de efeméride, debe llevarse como bandera en cada paso de lucha. La Noche de los Lápices es un claro reflejo de tiempos de gobierno de facto, de injusticia, de sangre.
Cada compañero caído sobrevive en los demás como estandarte y como suma de valor.